DISFRUTA DE LA GRANDEZA DEL LOUVRE: UNA ELEGANCIA FRANCESA DEL VIEJO MUNDO

El apartamento está situado en el quinto piso y se puede acceder a él mediante ascensor. La entrada se realiza a través de un pequeño recibidor que da al salón. En la parte sur, hay una cocina esquinera equipada con una encimera de madera natural que con sus tonos cálidos contrasta agradablemente con el blanco de los almacenes y las paredes. En la parte norte, un salón-comedor favorece la convivencia, con un cómodo sofá y sillón de madera, y una mesa de cristal que aporta luminosidad a la estancia. Esta primera habitación da a un pasillo que la separa de los espacios para dormir. Desde el pasillo se llega a una primera habitación a la izquierda, al baño de enfrente y a una segunda habitación a la derecha. A la izquierda, la primera habitación orientada al sur es un remanso de paz que invita al descanso tranquilo con sus tonos claros y madera, en armonía con otras habitaciones. Allí encontramos decoraciones orientales zen junto con una cómoda de inspiración china y lámparas de papel que difunden una luz suave. En la segunda sala, un aparato de radio de los años 40 y un mueble metálico que recuerda a los servicios industriales dan un acento retro a la estancia, mientras que inusuales viñetas acuáticas, caballitos de mar y langostas aportan un toque de ligereza a este espacio bañado de claridad. Configuración: 1 dormitorio con cama de matrimonio (140 x 200); 1 dormitorio con dos camas individuales regulables (2 x 80 x 200 o 160 x 200); 1 sofá cama doble (160 x 200) situado en el salón; 1 baño independiente que hace de unión entre los dos espacios para dormir; 1 aseo independiente.