En los últimos años, el concepto de trabajo a distancia ha experimentado una transformación, ofreciendo a los profesionales la libertad de trabajar desde cualquier lugar del mundo. Yo también decidí aprovechar esta flexibilidad y, durante casi tres semanas, tuve la oportunidad única de trabajar desde Bélgica mientras exploraba las ciudades de Bruselas, Amberes, Malinas, Gante, Hasselt y Knokke-Heist.
Una vida laboral diferente en el extranjero
Mi experiencia de trabajo a distancia en Bélgica fue un soplo de aire fresco. Después del trabajo, pude explorar las ciudades, conocer nuevos cafés, tiendas, parques y disfrutar de unas deliciosas patatas fritas y probar todas las cervezas belgas.
Escapando del calor de agosto de Madrid, me encontré en un clima con un agradable cambio de ritmo. Pero las diferencias no se limitaban al tiempo. La cultura y la rutina laboral belgas ofrecían un delicioso contraste con mis hábitos españoles.
En Bélgica, todo parecía suceder un poco antes. La hora de comer era a mediodía, mientras que la cena solía servirse sobre las 18.00 horas. Gracias a esta adaptación, después del trabajo tenía tiempo para estar con la familia y los amigos que hacía mucho que no veía y explorar la cultura local. Fue un cambio agradable respecto a las comidas y cenas tardías de Madrid.
Explorar los aspectos más destacados de mi trabajo
Lo mejor de mi estancia fue, sin duda, la oportunidad de salir de la rutina y explorar nuevas ciudades, como Amberes. Con su ambiente vibrante y su patrimonio, fue una ciudad que dejó una impresión duradera. Pero lo bueno del trabajo a distancia era que podía aventurarme fácilmente más allá de las fronteras belgas. Un fin de semana me subí a un tren con destino a París, disfrutando de la sensación de estar de vacaciones mientras cumplía con mis compromisos laborales.
Mis principales recomendaciones para su propia aventura laboral en Bélgica
Si está pensando en aprovechar las ventajas del trabajo a distancia y embarcarse en su propio viaje internacional, aquí tiene algunas actividades y comidas para mejorar su experiencia en Bélgica:
- Koffiekoeken Morgen: Empieza el día con los deliciosos pasteles de una panadería local.
- Lijnwaadmarkt: pasee y capture impresionantes imágenes de esta zona.
- Paseos en barco: Explore los canales de Brujas o Gante haciendo una excursión en barco.
- Vol au Vent: Saboree el auténtico sabor de este clásico plato belga.
- Mont des Arts: contemple la puesta de sol desde este impresionante mirador.
- Alquiler de bicicletas: Descubra la ciudad sobre dos ruedas y experimente el modo de vida local.
- Moules Frites: Disfrute de unas Moules Frites para cenar en una terraza.
- Calles de Amberes: Piérdete por las encantadoras callejuelas de Amberes.
- Chocolate: Satisfaga su paladar goloso con los chocolates Neuhaus o Cote d’Or.
- Manneken Pis y Jeanneke Pis: Visite estas emblemáticas estatuas de Bruselas.
Conclusiones: Equilibrio entre trabajo y pasión por viajar
Mi estancia en Bélgica fue una aventura extraordinaria que me permitió combinar mis responsabilidades profesionales con el placer de explorar. Creo que fue mi momento culminante del verano. Si tienes la oportunidad de trabajar a distancia y viajar, no dudes en aprovecharla. Sin duda, lo recomiendo. Por mi parte, ya estoy soñando con mi próximo destino. ¿Adónde te llevarán tus aventuras de trabajo a distancia?
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